Reflexión sobre el conflicto entre Palestina e Israel

Al final de la segunda guerra mundial cerca de 600 mil judíos, casi todos de origen polaco y alemán.de judíos quisieron establecerse en territorio palestino con la esperanza de crear un estado judío. Sin embrago a los árabes de la región, Palestina, Egipto, Líbano, Siria, Jordania y Cisjordania; no les agradó la idea, pues era una violación del territorio que consideran su patria, pero no pudieron hacer nada.

Para 1947 la Asamblea de las Naciones Unidas decide la división política del país en dos naciones, una árabe y otra judía. Un año más tarde, el sionista y primer ministro de Israel David Ben-Gurion declaró la independencia del Estado judío y es cuando la Liga Árabe le declara la guerra. La guerra árabe-israelí es uno de los conflictos más graves en la política mundial del siglo XX y lo que va del XXI donde se han librado batallas a lo largo de 60 años. En 1967, la Guerra de los Seis Días; en 1973, la Guerra de Yom Kipur; en 1982, la invasión israelí del Líbano; en 1987 surge la Primera Intifada contra Israel; a fines de 2000, la Segunda Intifada. Gradualmente, Israel fue ocupando mayor cantidad de territorios, lo que llevó al actual mapa donde los territorios palestinos han quedado reducidos a la una parte de Cisjordania (donde gobierna la Autoridad Nacional Palestina) y Gaza (donde ejerce el poder la organización insurgente Hamás).Todas estas batallas justificadas por las potenicias mundiales, principalmente EEUU y Rusia que fueron haciendo que los palestinos perdieran espacios terrestre y sufrieran bloqueos económicos.  

La situación con la Franja de Gaza es otra batalla mas librada por el sionismo internacional contra un pueblo prácticamente desarmado que cada vez va perdiendo mas terreno geográfico. Los principales medios de comunicación de todo el mundo-manejado arbitrariamente por el sionismo internacional- solo cuentan los hechos parciales, acusando a la agrupación Hamas de terrorista, cuando todos sabemos muy bien que es un partido político elegido soberanamente por su pueblo. El conflicto es complicado y ha provocado un debate muy duro llevando a declaraciones demasiado extremistas sobre las dos partes. En el caso de los sionistas y quienes apoyan al estado de Israel, acusan los palestinos de terroristas (generalización que se ha impuesto sobre todo el pueblo mulsuman), y aquellos que apoyan a los palestinos calificando al pueblo judio de Nazis. 

Claramente no estamos en frente de una guerra religiosa, ni ante la lucha de un Estado contra un grupo terrorista como muchos medios de comunicación nos quieren hacer creer. Estamos ante el enfrentamiento de un poder mundial que quiere hacerse de la riqueza petrolera de una región que viene siendo golpeada desde todo punto de vista por las nefastas organizaciones internacionales; las mismas que apoyan la colonización de las Islas Malvinas por Gran Bretaña. 

Ricardo Sebastian Gomez